¿Bajo qué vocación nace la Fundación DISA?
La Fundación DISA nace hace precisamente 10 años bajo la vocación del Grupo DISA de contribuir a la mejora social del entorno que le vio nacer hace ya más de 87 años. De devolver a la sociedad donde DISA ha ido creciendo una parte de lo que la población le ha dado al apostar por él.
Dar el paso de crear una fundación como la nuestra supuso una apuesta firme y convencida por ir más allá, por desarrolla una responsabilidad social corporativa con vocación de compromiso y continuidad.
En su ADN viene impregnada la responsabilidad social, ¿de qué manera apoyan y benefician a la sociedad canaria?
En el ADN de la Fundación DISA está contribuir, a través de distintas iniciativas y generando alianzas con otras entidades del tercer sector, a una mejora de nuestro entorno. Soñamos con una sociedad en la que la cultura, la investigación o la educación sean herramientas de cambio y, sobre todo, elementos para que los colectivos más vulnerables, la infancia o en definitiva cualquier colectivo sean cuales sean sus particularidades puedan mirar al futuro con ambición, en igualdad de condiciones. Por ello trabajamos con la educación como hilo vertebrador de una parte muy importante de todo lo que hacemos, ya que somos unos convencidos de su poder transformador.
Bien es cierto que ponen en marcha multitud de proyectos…
Habitualmente, la media anual de proyectos está en torno a 90. Esto supone que, en estos 10 años, hemos desarrollado más de 650 que se traducen en miles de acciones en el ámbito social, educativo, ambiental… Intentamos llegar a distintos tipos de necesidades y realidades con proyectos que siempre tienen una vocación de contribuir a la transformación del entorno en el que se desarrollan.
¿Tienen algún proyecto relevante previsto para este año?
Ponemos mucho de nosotros en cada uno de nuestros proyectos, para nosotros todos tienen algo que los hace relevantes. Si tuviera que destacar algunos, empezaría por aquellos que promovemos orientados a la comunidad educativa en su conjunto como son nuestra Escuela de Familias que ya suma cinco ediciones, la Escuela de Profes o la innovadora Escuela de Entrenadores que nace para cubrir una necesidad vinculada al deporte base y a la urgencia de promover líneas de formación e intercambio de experiencias orientadas a la gestión emocional, la resolución de conflictos o a la detección de situaciones de riesgo.
Además, fruto de nuestra convicción de caminar hacia iniciativas que promuevan la inclusión real de las personas con discapacidad, estamos especialmente orgullosos de nuestra apuesta por la promoción del deporte de alto rendimiento a través de nuestras becas CAPACITAS, la dotación de material inclusivo a los centros escolares de las islas con el proyecto INCLUYE-T o a la apuesta por apoyar la práctica deportiva de menores con discapacidad algo que hacemos de la mano del Comité Paralímpico Español a través del programa Relevo Paralímipico.
Estamos asimismo a punto de realizar el acto de entrega de nuestros Premios a la investigación Biomédica, iniciativa que ya cumple seis ediciones y que nace de nuestro convencimiento de la necesidad de contribuir a la dinamización y crecimiento del tejido investigador de las islas.
DESTACADO: “trabajamos con la educación como hilo vertebrador de una parte muy importante de todo lo que hacemos, ya que somos unos convencidos de su poder transformador”
Queda constancia de las numero- sas iniciativas que desarrollan. ¿Han sido satisfactorios los resultados en los últimos años?
Sí. Hay proyectos que siguen creciendo y llegando a nuevas regiones de nuestras islas. Así como hay otros que van cerrando etapas ya que somos unos convencidos de la necesidad de adaptarnos a lo que cada momento y colectivo necesita, una realidad que es absolutamente cambiante.
La vigencia y alcance de cada proyecto la determina nuestro entorno ya que somos conscientes de que una de las responsabilidades de las entidades del tercer sector como la nuestra es ser ágiles a la hora de proponer iniciativas que contribuyan a mejorar y transformar realidades. La tipología de cada proyecto depende mucho de la necesidad que aborda. Hay proyectos que tienen una fecha de inicio y final, y hay otros que se prologan en el tiempo tratando de paliar cuestiones a más largo plazo.
Un ejemplo son las acciones que pusimos en marcha vinculadas a la pandemia. En el minuto 0 del confinamiento inicial comenzamos a trabajar para dotar de equipos de informática a los niños que no tenían recursos en su casa para seguir el curso escolar, esa iniciativa finalizó una vez la administración público tomó cartas en el asunto. Si bien esa se dio por finalizada, queda aún vigente una línea de apoyo que iniciamos para entidades que atienden a menores en riesgo de exclusión, que nació de las necesidades del COVID y que, al seguir las entidades trasladándonos esta necesidad, la mantenemos vigente.
¿Cuáles son las principales problemáticas a las que intentan dar soluciones en el archipiélago?
Son muchas las necesidades y realidades a las que tratamos de dar respuesta, si bien es destacable nuestra vinculación a la puesta en marcha y apoyo a iniciativas sociales, ligadas a personas y colectivos vulnerables, entre los que las necesidades son en algunos casos abrumadores. Esta labor la realizamos gracias al gran número de alianzas que generamos con entidades que están en primera línea, que trabajan de forma directa con colectivos.
De hecho, aproximadamente el 40% de nuestro presupuesto del 2021 se dedicó a iniciativas que tienen algún componente social. Con la vocación de contribuir a cubrir realidades a las que no llegan otras entidades o la propia administración pública, tratamos asimismo de apoyar e identificar líneas de trabajo más innovadoras. Un ejemplo está siendo nuestra colaboración con la Asociación ASPERCAN para la instalación de pictogramas en espacios de acceso público, iniciativa innovadora que ya está siendo aplicada por otras entidades, que persigue promover la accesibilidad de universal con especial inciadencia sobre las personas diagnosticadas dentro espectro autista.
¿En qué aúna esfuerzos la Fundación DISA en este 2022?
El 2022 está haciendo un año en el que la actividad está siendo enorme y en el que tratamos de seguir haciendo crecer en calidad y ámbito geográfico muchos de nuestros proyectos. Asimismo, fruto de nuestro compromiso por estar atentos a lo que la sociedad nos demanda, somos plenamente conscientes de la preocupante situación actual en el ámbito de la salud mental, y por ello estamos ya trabajando para lanzar en los próximos meses diversas iniciativas orientadas a distintos aspectos de la prevención entre distintos grupos de edad.
Y, por supuesto, estamos trabajando con La Palma. Desde el primer momento de la erupción del volcán nos sumamos a las miles de empresas y entidades del tercer sector que contribuyeron a paliar las necesidades de ex- trema urgencia que iban surgiendo mientras el volcán seguía activo. Pero, como no podía ser de otra forma y como reclaman todos los palmeros desde el inicio de la catástrofe, seguimos allí trabajando de la mano de entidades de la isla para contribuir a que todas esas necesidades, que no son solo de reconstrucción de viviendas, sino de apoyo psicoeducativo y emocional, obtengan una respuesta.