El Consejo Escolar de Canarias demanda una mayor estabilidad normativa que parta de un pacto estatal sobre Educación, similar al que dio lugar a la Ley Canaria de Educación
Destacan un plazo insuficiente para ajustar la enseñanza a un sistema competencial, donde los centros y docentes carecen de un periodo adecuado de adaptación de materiales, diseño y planificación.
El CEC destaca en positivo que los nuevos currículos se focalizan en valores como la gestión emocional, la inclusividad y la diversidad, entre otros
“Las reformas proponen contenidos mejor organizados y priorizados, haciéndolos más operativos”, en un marco de aprendizaje competencial
Desde el CEC instan a alcanzar un consenso social y una mayor participación de la comunidad para una correcta integración de la nueva Ley
La reducción de la extensión de los currículos de Primaria y Secundaria es una las propuestas del Consejo para potenciar una enseñanza personalizada de calidad
La presidenta del Consejo Escolar de Canarias (CEC), Natalia Álvarez, ha comparecido hoy en el Parlamento de Canarias para analizar el impacto de la aplicación de la Ley LOMLOE en el Archipiélago. Su intervención ante la Comisión de Educación, Universidades, Cultura y Deportes, solicitada por el Grupo Parlamentario Sí Podemos Canarias, contó con la asistencia del grupo de presidencia de la Comisión, formado por la Presidenta Lucía Olga Tejera, la Vicepresidenta Melodie Mendoza, y el Secretario Poli Suárez; así como representantes de todos los Grupos Parlamentarios que la conforman.
Uno de los aspectos fundamentales que comparte el Consejo es su preocupación por la inestabilidad normativa, derivada de un exceso de cambios de leyes educativas en los últimos años, y el tiempo insuficiente del que han dispuesto los centros y el profesorado para prepararse para la LOMLOE.
Esta Ley supone la implantación total de un modelo de evaluación competencial. Esta transición requiere un proceso de diseño, planificación y desarrollo de material completo, y los centros necesitan un periodo de adaptación del que actualmente no han dispuesto. Asimismo, “el calendario establecido para la inserción de la nueva ley educativa parece insostenible, debido a que los centros han tenido que organizar su planificación didáctica sobre borradores sujetos a cambios y modificaciones, lo cual se ve agravado por la coexistencia de la LOMLOE y la LOMCE”, afirmó Natalia Álvarez.
Para paliar estas dificultades, el Consejo Escolar propone alcanzar un consenso social y la participación de la comunidad y un seguimiento participativo de la implantación de esta ley.
Otra de las recomendaciones presentadas ante la Comisión fue la de completar un proceso de pilotaje y evaluación del contenido de la ley para corregirla y adaptarla progresivamente a las realidades diversas que se encuentran en el aula, tal y como sugiere la propia norma. De igual manera, consideran imprescindible la formación y el acompañamiento al profesorado para alcanzar un cambio efectivo.
Análisis de los nuevos currículums
Álvarez ha destacado también otros aspectos positivos de la nueva Ley, tales como “su perspectiva empática de la convivencia escolar y el fomento de valores como la tolerancia y el respeto”. Además “la norma pone el foco en la diversidad, y se centra en el plano social; algo que reflejan los nuevos currículos para Infantil, Primaria, la ESO y Bachillerato”.
El CEC también considera positivo el impacto de la LOMLOE en el ciclo de Infantil, ya que lo define como una etapa con identidad educativa propia y con valor para cohesionar la enseñanza hasta completar la transición del estudiantado a Primaria y, a su vez, establece la dimensión emocional como una de las protagonistas de este periodo.
Aun así, el Consejo insiste en que es necesario dar un mayor espacio al desarrollo motor en esta etapa aumentando las sesiones semanales de educación física.
La presidenta del Consejo realizó también una valoración de las reformas que propone la Consejería de Educación, Universidades, Cultura y Deportes del Gobierno de Canarias referentes al ciclo de Primaria, ya que apuestan “por un innovador currículum basado en competencias que plantea un índice de contenidos mejor organizados y priorizados, haciéndolos más operativos”.
Otra de las virtudes de la LOMLOE, según el CEC, es que permite al profesorado adaptar su práctica al ritmo de aprendizaje y trabajo del alumnado, siendo esto un reflejo de priorizar los principios pedagógicos, la atención personalizada o la prevención de dificultades de aprendizaje. Otro rasgo innovador resaltado durante la intervención en esta Comisión es que se profundiza en el trabajo por competencias de manera transversal en todas las áreas como la comprensión oral y escrita, la comunicación audiovisual, las competencias digitales, la educación en el patrimonio histórico-cultural canario, la creatividad, el emprendimiento o el espíritu científico.
De igual forma, subrayan la importancia dada por la actual norma a la educación en valores como la igualdad entre hombres y mujeres, la inclusividad, el desarrollo sostenible, el consumo responsable o la educación para la salud; inculcando de manera implícita otras enseñanzas como la autonomía, la educación emocional, el valor de la lectura, la reflexión, la acción tutorial o la orientación educativa.
Calidad versus cantidad
No obstante, desde el CEC advierten que “para garantizar el éxito de este sistema y poder establecer una metodología que permita alcanzar sus objetivos, es necesario reducir la cantidad de conocimientos que se le exigen al alumnado en Primaria, lo cual permitiría a los equipos docentes focalizarse en una enseñanza individualizada”.
Otro aspecto destacado por Álvarez sobre la LOMLOE es la consideración de la Formación Profesional Básica como un nivel de enseñanza reconocido y fundamental, no como una medida compensadora restringida a personas con determinadas situaciones socioeducativas, sino como el primer escalón de un itinerario formativo personal.
Prioridad a la enseñanza personalizada
El CEC hace hincapié en la necesidad de dotar a la comunidad educativa de recursos que hagan posibles dos principios básicos de la nueva Ley: la atención personalizada y la autonomía de los centros. Para ello, es preciso que aumente la inversión en materia de educación como mínimo hasta el 5% nombrado en la Ley Canaria de Educación.
Por otro lado, recuerdan que el proyecto normativo en vigor no recoge los dos cursos del Programa de Diversificación Curricular, que tienen un importante carácter compensador para el estudiantado que presenta dificultades de aprendizaje.
Asimismo, aún se encuentran en proceso de elaboración los currículos de materias optativas de Bachillerato. Es uno de los resultados de la urgencia con la que se ha revisado esta ley, y que priva a la comunidad educativa de un periodo de reflexión adecuado sobre su contenido y aplicación. Junto a ello, está pendiente de informe la nueva Orden de evaluación.
Natalia Álvarez cerró su intervención con un reconocimiento a las comisiones que han elaborado los currículums. “Su profesionalidad y compromiso, simultaneando la redacción normativa con su labor docente, incluso durante el período de final de curso, debe ser valorada especialmente como muestra de participación e implicación de los profesionales de la educación en Canarias”, concluyó en el Parlamento.