En los tiempos que corren es muy importante evolucionar y adaptarnos a las nuevas aportaciones y maneras de transformación en todos los ámbitos y sectores, es por ello que en la gastronomía también debemos evolucionar pero sin perder nuestras tradiciones.
La evolución y la gastronomía son dos aspectos fundamentales en el mundo de la cocina, por su estrecha relación. Los cambios que se producen a lo largo del tiempo en las técnicas, ingredientes y formas de presentación y elaboración incurren en un cambio significativo para que la “ nueva cocina” tome cada vez más valor.
La evolución gastronómica implica la búsqueda constante de nuevas formas evolutivas introduciendo, a lo ya conocido, ingredientes y combinaciones de países que aportan nuevos sabores a nuestros platos.
Si nos referimos a la gastronomía en todos su pilares también hablamos del sector primario, que en los últimos años han introducido nuevos cultivos y técnicas sostenibles para ser más competitivos en un mercado cada vez más exigente y revolucionario.
La relación entre evolución y tradición gastronómica da lugar a una cocina rica y variada con experiencias culinarias más auténticas.
Podemos decir que Canarias evoluciona muy rápido a esta evolución y revolución gastronómica que nos muestra la riqueza de nuestros productos locales y las tradiciones, llevándonos a un mercado competitivo y paladares exigentes que buscan, no solo, comer de forma saludable sino de tener una experiencia nueva y con toques diferenciadores.