Vamos a continuar en esa senda, no es momento de tocarle el bolsillo a la gente
Comienza una nueva etapa en el ayuntamiento de Los Realejos. El antiguo alcalde se despidió para ejercer sus labores en el partido a nivel regional y usted asume la alcaldía, pero son muchos años de bagaje, por lo que no lo pilla de nuevo, sino que supone un poco de continuidad, aunque con una responsabilidad muchísimo más añadida…
La realidad es que son muchos años al lado de Manolo Domínguez. Desde el principio empezamos la andadura en el ayuntamiento juntos y, ciertamente, hemos trabajado codo a codo. Además, me dio la oportunidad de gestionar muchas áreas del ayuntamiento a lo largo de estos años.
Ahora es un punto y seguido, la continuidad la asumo con esa perspectiva, porque continuamos con el mismo equipo y con el mismo proyecto. El objetivo es llevar la gestión municipal hasta 2023.
Adolfo, hablamos de continuidad, me imagino que usted le dará las pinceladas como cualquier persona que llega a un cargo, pero la gestión de estos últimos años ha sido extraordinaria y los datos así lo avalan. Me imagino que seguirá una línea un tanto continuinista, pero con un toque propio de Adolfo, ¿verdad?
Nosotros nos presentamos a unas elecciones con un programa de gobierno que queremos desarrollar y que hemos desarrollado estos años, es verdad que este mandato con la crisis sanitaria se ha trastocado y muchos proyectos tuvieron que paralizarse, pero ya hemos vuelto otra vez a coger el impulso.
Mi objetivo es cumplir el programa de gobierno presentado a los vecinos y vecinas de Los Realejos. Y es verdad que, como todo en la vida, uno asume con su personalidad y con su forma de ver la vida el trabajo que hace cada día. Manolo Domínguez es Manolo Domínguez y Adolfo González es Adolfo González, son dos personas completamente diferentes que, aunque vayamos a pilotar el mismo barco, nuestro carácter y nuestra forma de ver la vida y la política no tiene nada que ver la de uno con el otro.
Una parte que ha funcionado bien es la parte económica. Cuando el Partido Popular llegó al gobierno de Los Realejos había muchísimos problemas económicos dentro del municipio y todo el equipo de alcaldía y sus concejales lograron sanear el ayuntamiento y gestionarlo de una manera muy eficiente, ¿seguirá siendo la parte económica fundamental a la hora de la gestión del municipio?
Es fundamental. Tengo claro que la estabilidad económica y financiera de nuestra casa común, como yo la llamo, es uno de los sellos de identidad del Partido Popular. No gastar más de lo que se tiene, respetar escrupulosamente el presupuesto municipal que se aprueba cada año y tener el compromiso de no subir los impuestos. Hemos logrado sanear las cuentas del ayuntamiento, hemos logrado crecer anualmente en el cómputo general del presupuesto municipal, recibiendo incluso sanciones del Gobierno de Canarias por no elevar la presión fiscal. Vamos a continuar en esa senda, no es momento de tocarle el bolsillo a la gente.
Hay una parte también muy interesante y es que antes nadie hablaba de Los Realejos. Hace años Los Realejos era un municipio más del norte y hoy está más de moda que nunca. Es un municipio con un marcado carácter deportivo y con un turismo rural y de naturaleza muy importante. Me imagino que poner a Los Realejos de moda ha sido y seguirá siendo complicado, pero también seguirá la senda…
Ese es uno de los objetivos que siempre hemos tenido en mente, situar a Los Realejos dentro del mapa de la isla de Tenerife.
Cuando nosotros llegamos al gobierno, hace ya muchos años, éramos el municipio comodín de El Puerto de la Cruz y el valle de La Orotava, Los Realejos no destacaba por nada en concreto poco más que por ser el municipio en el que más fiestas se celebran en toda España. Lo que hemos pretendido es que Los Realejos suene con nombre propio y que sea un referente y creo que lo hemos conseguido en todos estos años.
Asimismo, en las políticas de apoyo empresarial y en el ámbito económico también hemos sido un referente gracias a todas las iniciativas que hemos llevado a cabo. De hecho, con respecto a la materia comercial, hemos sido reconocidos por el Gobierno de España a través de la Dirección General de Comercio por nuestras políticas comerciales.
Habla usted del apoyo a los nuevos proyectos, a los autónomos y a la empresa, ¿seguirán los próximos años con esta política? Porque han sido pioneros en muchas de las ayudas creadas, no solo en la pandemia, sino previamente.
La pandemia hizo que el uso de las terrazas se generalizara, que en Los Realejos no fue diferente y fuimos el primer ayuntamiento en regularizar la ocupación del espacio público, y ahora hemos sido el primer ayuntamiento de toda Canarias en sacar una línea de subvenciones para las empresas del sector de la restauración que quieran, de manera permanente, establecer una terraza ocupando el espacio público, el ayuntamiento les financia hasta el 50% de esa instalación. Este es un ejemplo más de todas las políticas que estamos desarrollando para, según se vayan dando las circunstancias, poder ayudar al tejido empresarial.
Teniendo en cuenta que la oposición ha sido muy dura frente a las decisiones que se tomaban desde el gobierno de Los Realejos, ¿le preocupa lo que pueda generar la oposición en este último año?
Yo, en la toma de posesión, le tendí la mano a la oposición para colaborar. Soy de llegar a acuerdos más que de enfrentamientos.
Ciertamente, hemos tenido una oposición algo desdibujada en estos años, incluso en momentos en los que creo que podían haber planteado muchas más cosas para el municipio y no lo han hecho. También tengo que decir que la mayoría de las propuestas que la oposición ha presentado en el pleno las hemos aprobado, es verdad que normalmente se suele hacer más ruido cuando no se aceptan las propuestas que cuando se llevan a cabo, pero la mayoría sí las hemos aprobado.
De todas maneras, les tendí la mano y saben perfectamente que me van a tener para todo lo que ellos estimen.
¿Cuáles de los proyectos que se plantearon en el programa de gobierno no se pudieron cumplir a consecuencia de estos dos años que llevamos de crisis y qué le gustaría a usted retomar cuanto antes?
Hay una cuestión fundamental que es el Plan General de Ordenación Urbana, el cual lleva años en su tramitación y fue en su momento un ejercicio modélico de participación pública y ciudadana, pero hoy en día todavía se nos sigue requiriendo modificar y aclarar determinados informes, los últimos informes de sostenibilidad ambiental del documento. Ya lo hemos remitido al Gobierno de Canarias y de verdad espero y deseo que se le dé el visto bueno, porque de él dependen muchas cuestiones importantes para el municipio.
Están pendientes también distintas remodelaciones, hay proyectos como el ansiado centro deportivo, algunas casas antiguas pendientes de reformar, ¿cómo van a ir saliendo estos proyectos?
En estos momentos se está adjudicando la redacción del proyecto básico de la nueva piscina y complejo deportivo de Los Realejos, se está redactando la rehabilitación de la casona de La Gorvorana, ya se está ejecutando la obra del Teatro Cine Realejos y como esos, otros proyectos importantes dentro del Plan General de Ordenación Urbana.
Este año, por ejemplo, vamos a invertir más de 10 millones de euros en el plan de barrios de Los Realejos, entre el que destacaría la remodelación integral de La Romántica II o la remodelación del parque de La Parra.
Se mete en este camino con toda la ilusión del mundo, usted se ha comprometido con el pueblo realejero pero, ¿qué le pide al pueblo de Los Realejos?
Yo no entiendo la política como un privilegio, ser alcalde de Los Realejos es una responsabilidad, dije que no quería honores, ni siquiera voy a cobrar un salario del propio ayuntamiento, yo cobro mi sueldo de la consejería de educación, seguiré viniendo a trabajar como he venido estos años y lo que le pido a los realejeros y realejeras es que sigan colaborando con nosotros en todo lo que estimen, que las puertas de la alcaldía están abiertas, que las crucen, que las tengan a su disposición y que, al final, el proponer, quejarse o solicitar algo es construir juntos el municipio.