Drago Canarias, partido que formó el expolítico de Podemos Alberto Rodríguez, quien lideró la candidatura de Sumar en las pasadas elecciones generales sin conseguir escaño, ha denunciado que sus posiciones no han sido tenidas en cuenta en el programa de gobierno, aunque se compromete a respetar el acuerdo parlamentario de legislatura.
Asimismo, ha señalado este viernes que la «guerra abierta» entre la formación morada y la liderada por la actual vicepresidenta Segunda del Gobierno de España, Yolanda Díaz, ha convertido al archipiélago en un «rehén de disputas o intereses ajenos» a las islas.
Drago Canarias asegura que «no es una opción silenciar» lo que está sucediendo en el archipiélago en esta «guerra abierta» de Podemos con Sumar y en la que «Canarias se ha convertido en un rehén por apropiación de acuerdos conjuntos, por incumplimiento de un programa y acuerdos políticos», lamentando que se vuelve a hacer la «vieja política del régimen: pactar, prometer y ofrecer amplios acuerdos a la ciudadanía antes de las elecciones y después de las elecciones incumplir todo lo prometido y robar la representación colectiva».
El partido fundado por Alberto Rodríguez asegura que el acuerdo político con Sumar para las elecciones generales se hizo “desde la autonomía de las partes”, fue “un acuerdo de listas y un acuerdo económico de igual a igual”, no de adhesión ni “sucursalismo”.
“Realizaremos nuestros propios posicionamientos sobre la labor del ejecutivo y haremos seguimiento con especial incidencia sobre las temáticas que mayor incidencia tienen en la realidad de nuestro país”, como trabajo y seguridad social, migraciones, política territorial, sostenibilidad y derechos sociales, anuncia Drago Canarias.
En el escrito se repasan los resultados electorales en Canarias y se destaca que Sumar se quedó a 0,23% de obtener representación por Santa Cruz de Tenerife, pero hubo “un boicot activo” por parte de “personas referentes” de Podemos, pese a que también participaba en la coalición.