El sindicato de Enfermeras y Fisioterapeutas SATSE ha demandado este miércoles mejorar las ratios de estas profesiones en el Servicio Canario de Salud, reconocer las especialidades de los fisios y, en el caso de la enfermería, con carreras profesionales muy largas de hasta 40 años, anticipar la jubilación hasta los 60 o 62 años.
En declaraciones a los medios durante una protesta en la sede de Recursos Humanos del Servicio Canario de Salud en Las Palmas, el secretario autonómico de SATSE en Canarias, Leopoldo Cejas, ha criticado que la propuesta de Ley de Seguridad del Paciente, una iniciativa legislativa popular que consiguió el apoyo de más de 700.000 personas, haya sufrido más de 30 prórrogas en el Congreso de los Diputados y siga sin tramitarse.
«A nivel autonómico queremos un proceso de estabilización real tanto de las plantillas de enfermería como de fisioterapeutas porque seguimos teniendo unas cifras tremendamente bajas en relación con la media estatal y europea. Tendríamos que doblar el número de profesionales para estar en unos niveles aceptables«, ha resumido Cejas.
Asimismo, Cejas ha abogado por un proceso para compensar la pérdida de enfermeras que abandonan la profesión por voluntad propia debido a las condiciones laborales.
«Seis de cada diez enfermeras ha pensado alguna vez en abandonar, un lujo que las infraestructuras sanitarias no se pueden permitir«, ha dicho.
También ha demandado una recalificación profesional, «parada desde 2005», ya que, a su juicio, a los profesionales de la enfermería les corresponde no tener subgrupos, una realidad que según ha aseverado «limita el acceso a determinados puestos de gestión en la administración».
«Otra petición es atender a las características de la profesión y la penosidad del trabajo. Se pierden entre cinco y diez años de calidad de vida. Para una carrera como enfermería, muy larga, es razonable pedir una jubilación anticipada que ronde los 60-62 años«, ha expresado Cejas.
Ha calificado de «insostenible» tener entre 15 y 20 pacientes por enfermero y planta al día en los hospitales, una cifra que alcanza los 70 u 80 en los centros sociosanitarios como residencias.
Canarias, ha añadido, tiene menos de 5 enfermeras por cada 1.000 habitantes, mientras la media española se sitúa en 5,4 y la europea en un 8,8.
«Para ponernos al menos en la media de la sanidad española necesitaríamos unas 2.000 enfermeros para especializada, primaria y sociosanitaria», ha calculado el enfermero, que también ha reclamado «no perder» a los profesionales contratados por cincunstancias covid, porque en su opinión «harán falta».
Por su parte, el fisioterapeuta Alberto Simón ha apuntado que el «principal problema» que encuentran en el Servicio Canario de Salud es el número de profesionales de esta rama, con un ratio de pacientes «perverso».
«Nos preocupa la calidad asistencial y la calidad de los tratamientos que reciben los pacientes de fisioterapia», ha resumido Simón, que ha dicho que mientras en Canarias se necesita un fisio por cada 1.000 pacientes, en la actualidad esa cifra se sitúa en uno por cada 8.000.
El fisioterapeuta ha afirmado asimismo que la presión asistencial que se vive a raíz de la pandemia ha aumentado también en esta especialidad y ha pedido también que permanezcan en plantilla los contratos covid «porque son plazas que hacen falta, independientemente de las olas«.
Además, tanto por el envejecimiento de la población como, por ejemplo, la proliferación de pacientes con secuelas covid, Simón ha pedido actualizar y reconocer las especialidades de esta profesión, que es, según ha dicho «heterogénea, con especialidades sin reconocer, como la fisioterapita respiratoria, intensiva o neurológica», ha concluido.