Ya el año pasado indagamos en los desafíos superados con la creación del Clúster en 2018 y el reimpulso del mismo en 2023. En la actualidad, con la incorporación de nuevos socios y el refuerzo institucional, ¿cuáles son los objetivos prioritarios del Clúster de Enoturismo de Canarias a corto y medio plazo?
Considero que el objetivo primordial, tanto a corto como a largo plazo, es consolidar a Canarias como un destino enoturístico clave en las consideraciones de los turistas que nos visitan y, por supuesto, de los habitantes de las islas. Hemos tenido la oportunidad de presentar la oferta de Canarias desde una perspectiva enoturística en diversas ferias, y la respuesta ha sido muy satisfactoria, incluso sorprendente. A pesar del reconocido prestigio de los vinos canarios, muchos turistas, especialmente anglosajones, norteamericanos y de otros países europeos, no consideran Canarias como un destino para conocer nuestras bodegas y nuestra oferta enoturística. Sin embargo, al descubrirla, muestran un gran interés, aunque inicialmente con cierta incredulidad, ya que representa algo completamente diferente a lo que están acostumbrados en la península ibérica y en otros países europeos. En resumen, el objetivo es explotar este gran potencial en un momento en que tanto la sociedad como las instituciones canarias, a nivel gubernamental y empresarial, apuestan por un turismo más respetuoso con el medio ambiente, que genere un mayor valor añadido y que se interese por nuestra gastronomía, nuestros paisajes, nuestros vinos y, en definitiva, atraer a un turismo de calidad. Esta es la simbiosis deseada entre el sector primario y el sector turístico.
¿Se está percibiendo ya a Canarias como un destino enoturístico consolidado fuera de las fronteras españolas, en consonancia con lo que comenta?
No, actualmente se percibe como una apuesta, como una muestra del potencial que tenemos. Sin embargo, necesitamos una oferta agrupada, y en este sentido, el clúster desempeña un papel fundamental al articularla. El turista que visita Canarias, afortunadamente, suele ser un visitante recurrente, y es necesario ofrecerle nuevas experiencias.
Existen destinos enoturísticos, como Lanzarote, que están muy consolidados, pero el resto de las islas no son tan conocidas en este ámbito. Dado que el turista repite sus visitas, atraído por los valores turísticos bien conocidos de Canarias, debemos brindarle la oportunidad de diversificar sus experiencias, de variar sus destinos y de no visitar siempre la misma isla o las mismas bodegas.
El objetivo de aprovechar la afluencia turística actual es muy ambicioso. ¿Qué estrategias específicas están diseñando para crear sinergias entre este sector -el sector turístico- y las bodegas?
Considero que el papel institucional del clúster como representante de la oferta enoturística de Canarias, en colaboración con instituciones clave como la Consejería de Agricultura a través del Instituto Canario de Calidad Agroalimentaria y de Gestión del Medio Rural de Canarias, es fundamental para asistir a diversas ferias, promocionando y dando visibilidad a nuestra oferta. Asimismo, la Consejería de Turismo y Empleo del Gobierno de Canarias también apuesta por ese turismo de calidad que mencionaba, y considera que el clúster puede ser el canal para mostrar, a través de ferias y otras plataformas turísticas, esta oferta tan singular que en otros destinos europeos o de la península ibérica está completamente consolidada, y que en Canarias estamos comenzando a dar a conocer.
Las propias estadísticas del Gobierno de Canarias indican que entre un 2% y un 4% de los turistas muestran interés por la oferta enogastronómica, una cifra que consideramos exigua y que revela un importante potencial de crecimiento. Trabajando de la mano de las instituciones, este potencial es enorme, considerando la singularidad de los paisajes y vinos canarios.
“Existen destinos enoturísticos, como Lanzarote, que están muy consolidados, pero el resto de las islas no son tan conocidas en este ámbito”
En cuanto a los próximos pasos clave para posicionar a Canarias como un destino enoturístico de referencia a nivel internacional, creo que debemos mantener una presencia muy activa, junto con las instituciones y el propio clúster, en medios especializados web y redes sociales, algo que sin duda lograremos gracias al apoyo y acuerdos alcanzados con PROMOTUR. Además, la asistencia a ferias donde presentamos a Canarias como un destino enoturístico es crucial, y aunque ya estamos trabajando en ello con las instituciones, nos gustaría intensificar esta promoción.
Una muestra de este esfuerzo es la colaboración con Proexca para digitalizar la oferta y facilitar su difusión en diversos idiomas, así como el fortalecimiento de nuestra página web. Otro aspecto fundamental es la formación del personal de las bodegas. Queremos asegurar que la experiencia de visita de los turistas sea plenamente satisfactoria, generando recomendaciones positivas, ya que un cliente satisfecho es el mejor prescriptor. Eneste sentido, hemos firmado un convenio con Hecansa, Hoteles Escuela de Canarias, que nos permitirá ofrecer esta formación, también a través de un socio nuestro, la cátedra de agroturismo de la Universidad de La Laguna y el ICCA. El objetivo es reforzar la calidad de la visita para que los turistas la recomienden, ya que el boca a boca es la mejor publicidad.
¿Cuál es su visión personal a largo plazo para el enoturismo en Canarias y qué papel espera que juegue el Clúster en la consecución de esa visión?
Considero que el enoturismo tiene un papel crucial que desempeñar en Canarias, especialmente porque las tasas de crecimiento del turismo tradicional no pueden ser infinitas. Nos encontramos en un momento en que todos, sin excepción, estamos apostando por un turismo menos masificado, de mayor calidad y que genere un mayor valor añadido. La apuesta por el enoturismo cumple perfectamente con estos requisitos. No debemos olvidar que nuestros agricultores y ganaderos son quienes configuran el paisaje que atrae a los turistas, por lo que el futuro está claramente ligado a este tipo de turismo.
En cuanto al papel del clúster, es fundamental que un mayor número de bodegas se involucren y formen parte de esta asociación empresarial. Es importante recalcar que somos una asociación empresarial, y nuestro objetivo es que tanto el sector primario como el turístico obtengan beneficios legítimos a través de la explotación ordenada y sostenible de nuestros recursos, del campo y de nuestros productos de proximidad. En este sentido, necesitamos que la oferta que se articula a través del clúster, es decir, nuestros asocia- dos, crezca para que este destino sea lo más atractivo posible.