me paran y me preguntan muchas veces, porque que no se apoya la compra de productos Elaborados en Canarias, en las licitaciones y adjudicaciones de productos y/o servicios en Canarias, frases como: ………”ni siquiera me entran a valorar las ofertas que realizo”, …. “estoy cansado de presentarme a las licitaciones, siempre se las llevan empresas de fuera y luego me subcontratan a mí”, ….”no hacen más que pedirme muestras, ofertas, condiciones y precios y, luego nada”… Estas y otras preguntas son las que me hacen a diario y no sé qué contestar, la verdad, que cada día que pasa me cuesta más, no ya no poder dar una respuesta, sino lo que es más grave, no entender que es lo que está pasando. Son muchos años ya, trabajando en la empresa privada, ejerciendo como empresario autónomo, en la Administración Pública y una buena cantidad de años en el Asociacionismo Empresarial, pero de verdad, sigo sin entender el problema. Un problema que afecta sobre todo a las empresas canarias que son siempre las que salen mal paradas en todo este sistema de las licitaciones públicas. Y esto no puede seguir así, tenemos entre todos que ser proactivos y resolver esta problemática.
Lo que hay que hacer de verdad y de manera inmediata es, creer realmente y no de boquilla, que en Canarias hay productos y servicios que pueden satisfacer completamente las demandas, necesidades y características de las condiciones reales que se deben incorporar en las cláusulas de licitaciones, siempre dentro de la legalidad, esto no lo mencionaré más porque forma parte intrínseca de la realidad y necesidad de una licitación y contratación pública, como es, el cumplimiento de la legalidad vigente.
Pero creo que hoy, mañana ya será tarde, ha llegado el momento de proceder a una interpretación/consideración/adaptación, como queramos definirlo, de las normas, bases, clausulas, licitaciones y toda la serie de requisitos que rodean las licitaciones y concursos públicos. Debemos ser conscientes realmente de que es lo que se pretende, no solo por el legislador, sino por la sociedad en su conjunto, autentica destinataria del bien y/o servicio. Y sobre todo, poner en valor lo que ese bien y/o servicio representa, aporta y va a significar a esas personas o empresas y, también a la sociedad en la que esas personas y empresas se encuentran. No podemos seguir como hasta ahora, digan lo que digan, que el valor fundamental para la toma de decisiones, sea el precio. ¿Qué es el precio?, ¿el importe que se abona por el bien o servicio?, es decir, el precio que figura en el pliego. Creo que es imprescindible, que nos planteemos porque hay esas diferencias de precio, habría que valorar porque tiene ese valor (que hay detrás de ese bien y/o servicio, y también quien lo fabrica y quien presta el servicio) y, no solo eso, sino lo que es aún más importante, ese precio teóricamente más económico en un papel, que es lo que es en definitiva, un pliego de licitación, es verdaderamente el que determina la valía del bien y/o servicio, frente a otros productos y/o servicios que no se valoran y se desechan, porque la mayoría de las veces ni se conocen, no se sabe sus características, ni sus condiciones, solo porque tienen un teórico precio superior. Se tiene realmente en cuenta lo que ese solo factor de valoración que es el precio, puede suponer en el conjunto de los actos, servicios, actividades y/o fines a los que el bien y/o servicio se va a destinar, y que decir, de los efectos directos y sobre todo indirectos, que se pueden obtener de los productos que se presentan a la licitación, tiene en ese caso de verdad ese bien y/o servicio lo que se debería de decir, el mejor precio.
De verdad, no me gusta decirlo, porque parece muy simplista sobre todo cuando hablamos de Economía y más cuando hablamos del Futuro de Canarias, pero el refranero popular es muy sabio y así lo expresa esta situación: ….”lo barato sale caro”… Y no voy a perder ni tres líneas, en entrar a comentar los innumerables casos que existen en la actualidad en los medios de comunicación.
Estoy seguro de que esto, lo vamos a arreglar entre todos. Cuando digo todos, somos todos, porque en esto o entramos todos o no sirve para nada, no quiero circunscribir esto solo a las licitaciones públicas, esto lo llevo a las compras en todos los ámbitos y, por supuesto, también en el ámbito empresarial. Es más debemos, ser los empresarios los que demos ejemplo y sentemos cátedra en la forma de llevar a cabo nuestras compras y adquisiciones de productos y servicios. Somos los empresarios y profesionales, los que debemos en estos actos tener en cuenta, como ya hacemos en la mayoría de los actos, efectuar una valoración de un proceso de compra, con todos los factores que a nosotros nos gustaría que nos valoraran cuando ofertamos nuestros productos, debemos ser ejemplo y espejo cara a los demás.
No es necesario indicar que la puesta en marcha de una acción de valoración de las licitaciones con estos criterios, impulsaría la competitividad de las empresas canarias, sería en sí mismo un factor competitivo, y tendría un impacto tremendamente positivo en la economía local y en la creación de empleo y de arrastre entre sectores.
Vamos a ver brevemente, como esto que en Canarias se considera utopía e imposible, se ha aplicado o implementado de alguna manera en otras Comunidades Autónomas:
País Vasco: Comunidad a la que siempre se pone de referencia, como ejemplo, tiene reconocida una medida, como es la “contratación verde» en la que tienen vamos a decir, preferencia productos y/o servicios que favorecen el medio ambiente.
Cataluña: Otra Comunidad que también se pone siempre como ejemplo, ha impulsado de manera importante la adquisición pública de productos y/o servicios de Cataluña, mediante la Ley de Contratos del Sector Público, en la que prioriza, la prevalencia en las contrataciones públicas, siempre y cuando cumplan con los requisitos técnicos y de calidad necesarios, a los productos de proximidad.
Andalucía: Ha llevado a cabo acciones para fomentar la compra pública responsa- ble, con la base fundamental de apoyar a los productos locales en las licitaciones públicas. Para ello, han implantado cláusulas sociales y medioambientales en los contratos públicos que favorecen a los productos y/o servicios que cumplen las mismas.
Comunidad Valenciana: Aquí el gobierno ha establecido políticas de compras verdes que valoran de manera positiva la adquisición de productos y/o servicios, que sean respetuosos con el medio ambiente y, además sean producidos en la Comunidad.
Como se puede constatar, día a día en los mercados y establecimientos de Canarias y en el mundo laboral Canario, las empresas canarias que producen Productos Elaborados en Canarias y prestan Servicios en Canarias, cumplen con todas las medidas que hemos visto han establecido otras Comunidades Autónomas y por ello, en caso de haber estado implantadas en dichas CCAA, tendrían con total seguridad una importante participación en la contratación de la oferta pública de esas CCAA, todo lo contrario de lo que ocurre en su propia Comunidad Autónoma, que es Canarias, donde están implantadas, por ahora, mientras puedan sobrevivir en este complicado entorno económico que cada es más globalizado y no defiende lo local.
Creo que entre todos podemos buscar medios y planteamientos para reconducir esta situación, a continuación enumero algunas medidas que considero viables que se pueden llevar a cabo, de una manera inmediata, en varios campos:
• Educación y sensibilización: Considero prioritario que los responsables de los procesos administrativos, tengan conocimiento de los beneficios que la adjudicación de productos y/o artículos de empresas locales, puede reportar a la sociedad donde se a ejecutar esa licitación. Por ejemplo, es vital ver que la licitación de un producto de alimentación, por ejemplo, no acaba solo en el hecho de adjudicarlo al TEORICO mejor precio, es necesario ver y valorar, que aporta ese producto a la economía local, desde su origen del ciclo de vida, hasta la finalización de su ciclo, frente al resto de productos ofertados y, cuando se realice y valore esa comparativa es cuando se realmente se podría con total rotundidad, decir, este producto y/o servicio tiene el mejor PRECIO REAL.
• Se han de simplificar al máximo posible todos los procesos administrativos implícitos en la licitación, de esta manera las empresas locales que en la gran mayoría son pymes puedan acceder de una manera más eficiente.
• Establecimiento de cuotas mínimas: Establecer cuotas o metas para las compras locales puede ser una manera efectiva de garantizar que se dé prioridad a los proveedores locales.
• Incentivos fiscales: Ofrecer incentivos fiscales, sobre todo del Régimen Autonómico, a las empresas que se presenten a las licitaciones, cuando oferten bienes y/o artículos Elaborados en Canarias, puede ser una medida importante de aplicar.
Muy brevemente, por si alguien todavía no lo entiende, enumero algunos de los beneficios que puede conllevar el hecho de Apoyar lo Local en las Contrataciones Públicas en Canarias:
Estímulo a la Economía Local: Al dar prioridad a los productos y servicios canarios en las contrataciones públicas, se impulsaría la demanda interna y se fortalecería el tejido empresarial local. Esto contribuiría a dinamizar la economía regional y a reducir la dependencia de importaciones.
Generación de Empleo: La preferencia por lo local en las contrataciones públicas fomentaría la creación de empleo en Canarias al brindar oportunidades a las empresas locales para participar en proyectos gubernamentales. Esto ayudaría a reducir las tasas de desempleo y a mejorar las condiciones laborales en la región.
Desarrollo Sostenible: Al promover la adquisición de productos y servicios canarios, se podría reducir la huella de carbono asociada al transporte de mercancías desde fuera de la región. Además, se incentivaría la producción local bajo estándares ambientales y sociales más estrictos, contribuyendo así al desarrollo sostenible de Canarias.
Reducción de la Dependencia Exterior:
Al favorecer la adquisición de productos y servicios locales, se reduciría la dependencia de importaciones en Canarias. Esto no solo fortalecería la seguridad alimentaria y energética de la región, sino que también impulsaría la producción local y la diversificación económica, reduciendo así la vulnerabilidad ante crisis externas.
Desarrollo de una Economía Resiliente: Promover la economía local a través de las contrataciones públicas crearía una base sólida para una economía más resiliente y sostenible en Canarias. Al fortalecer los lazos entre el sector público y privado, se fomentaría la colaboración y la innovación, preparando a la región para enfrentar desafíos futuros y aprovechar oportunidades de desarrollo.
En resumen, la priorización de los productos y servicios canarios, en las contrataciones públicas podría ser un catalizador para el crecimiento económico, la creación de empleo y el desarrollo sostenible en Canarias. Al adoptar políticas que fomenten la economía local, estaríamos, entre todos, sentando las bases para un futuro próspero y equitativo para todos los habitantes de Canarias.
