El eurodiputado del Partido Popular, Gabriel Mato, ha planteado cinco medidas que considera necesarias para proteger a operadores pesqueros de la UE frente a los procedentes de terceros países y que, además, están en la línea con los informes científicos. Considera que, con esta batería de acciones, se conseguirá frenar la pérdida de competitividad que se ha producido desde el año 2008.
Tras la presentación, en la Comisión de Pesca, de un estudio del Centro Tecnológico del Mar y los Alimentos del País Vasco y de la Universidad de A Coruña sobre las opciones políticas para reforzar la competitividad del sector pesquero europeo y de la acuicultura, Gabriel Mato, defendió que “la Política Pesquera Común debe garantizar un campo de juego que esté, equilibrado entre todos los actores, precisamente para evitar que los pescadores y productores acuícolas de la UE sean los que siempre pagan la factura”.
“El estudio de estos expertos científicos lo deja claro: la Unión depende en casi el 70% de los productos pesqueros importados”, destacó el eurodiputado, “un porcentaje que deja claro que la autosuficiencia se ha reducido de forma considerable, hasta el punto de que nuestros productores sólo pudieron satisfacer escasamente el 38% de la demanda en el año 2021”.
A su preocupación, por el futuro del sector europeo, Mato añadió que “muchas de esas importaciones acaban viniendo de países donde las medidas de conservación y gestión de pesquerías, la higiene, la calidad de los productos pesqueros y las condiciones laborales son muchísimo más laxas en comparación con las que tiene la Unión Europea”. “Mientras, los productores de la UE están sujetos a unas medidas muy estrictas de conservación y control, además de a una pesada burocracia, que los posiciona en una situación de grave desventaja competitiva”, añadió.
Gabriel Mato también confirmó que “la obsesión por imponer criterios ambientales por encima de los criterios sociales y económicos ha contribuido a acentuar aún más la pérdida de competitividad de los operadores de la Unión Europea”.
“Además, cuando hablamos del sector pesquero europeo no debemos olvidar que el sector del procesamiento es responsable de importante contribución a la seguridad alimentaria de la Unión y, por tanto, requiere importaciones sostenibles”, dijo.
Las cinco medidas
En primer lugar, el eurodiputado afirmó que “tiene que haber un trato igualitario para los productos pesqueros importados y para los de la Unión Europea, exigiendo que todos los productos procedentes de terceros países cumplan exactamente las mismas medidas de conservación y gestión que que se exigen en la Unión Europea”.
La segunda medida planteada por Gabriel Mato es que haya “una mejor coordinación entre las políticas comerciales y pesqueras de la UE”. En tercer lugar, reafirmó “la necesidad de mantener acuerdos de pesca sostenibles e, incluso, promover la firma de otros nuevos”.
La cuarta medida propuesta por el eurodiputado canario está orientada a “mejorar la recopilación de datos comerciales para los productos procedentes de fuera de la UE”, de forma que se puedan tomar decisiones cualificadas basadas en realidades constatadas.
Por último, la quinta media plantea un uso más eficiente de los recursos del Fondo Europeo Marítimo, de Pesca y de Acuicultura por parte de todos los Estados miembros.