En estos tiempos que corren, ¿cómo evalúa la realidad de la profesión de enfermería en Canarias?
Realmente, Canarias disfruta de unos magníficos profesionales. Somos una comunidad que cuenta con una muy buena formación a nivel universitario, pero nos encontramos con una realidad y es que muchas veces el mercado laboral no se ajusta a esta calidad asistencial. Sabiendo que nuestro mayor empleador es el servicio público -el Servicio Canario de Salud-, muchas veces adolece de las contrataciones necesarias para que todos los profesionales puedan desarrollar su actividad.
¿Cuáles han sido las líneas de actuación del Sindicato en estos últimos años?
Básicamente, estos últimos años han estado marcados por la pandemia y todo lo relacionado con el COVID. Justo en ese periodo de tiempo, la enfermería realizó una demostración cualificada de todas sus actividades asistenciales, tanto en atención primaria como en atención especializada en las unidades de hospitalización, en las UVIS o en las Unidades de Críticos. Se hizo un trabajo muy bueno y no solamente desde el punto de vista asistencial, sino también desde el punto de vista de conexión a aquellos pacientes que no podían comunicarse con sus familiares, pues sirvieron como puente y nexo de unión. Fue una de las situaciones en la que se visualizó toda la actividad que se desarrollaba de una forma intensa.
A medida que la pandemia nos fue atacando en las primeras fases con mayor virulencia, una de las cosas buenas que se hizo fue aumentar las contrataciones, lo que nos permitió situarnos en cifras cercanas a la media nacional de enfermeras por cada 1.000 habitantes.
Una de nuestras evidentes reivindicaciones ahora es que se mantenga este nivel de contrataciones, porque es absolutamente necesario para intentar volver a una situación estable y normalizada desde el punto de vista asistencial.
¿Está siendo ágil la Administración en la estabilización de las plazas?
En este momento estamos cumpliendo desde el Servicio Canario de Salud estrictamente los plazos. La ley de procesos de estabilización lo que venía a decirnos, de alguna manera, era que antes del 30 de junio había que colocar las plazas que van a salir a concursar el 31 de diciembre y que, antes del 31 de diciembre de 2024, tienen que estar todos los procesos cerrados. Ahora mismo, desde el Servicio Canario de Salud se han dado unos pasos que son necesarios para llevarlo a cabo, como lo es la publicación de las plazas y la publicación de la fase. En concreto, para enfermería se iniciará el procedimiento en el mes de mayo de 2023, que es cuando se abre el plazo de solicitudes para la participación en este proceso de estabilización.
¿Qué opinión merece, desde este Sindicato, la incorporación de enfermeras escolares?
Era una reivindicación del Sindicato desde hace muchísimos años. Nos parecía que era un figura absolutamente necesaria para coordinar la parte asistencial, relacionada con el Centro de Salud, con el alumnado y no solamente con los alumnos, sino con el centro escolar, con los docentes y con la Comunidad Educativa. Nos parecía fundamental.
De hecho, siempre dijimos que era imposible disponer de 1.300 enfermeros para tener uno en cada una de las unidades escolares, pero sí que teníamos que empezar con un proyecto piloto que nos permitiera ver los beneficios, trabajar en la educación sanitaria de los menores y en sus hábitos saludables, y veíamos claramente cómo se iba retrasando en el tiempo.
Incluso, en algunas ocasiones, a parte de dirigirnos a la propia Consejería de Sanidad y al Servicio Canario de Salud, también lo hicimos a otros grupos políticos que no estaban en el gobierno, a los que les instábamos a que en el Parlamento se adoptara la decisión de que se incorporara la enfermera escolar. Finalmente, acabó aprobándose en el Parlamento dicha resolución para que muchas profesionales pudieran ocupar el puesto de enfermera escolar.
Por tanto, desde el Sindicato nos congratulamos de que eso sea así. Estamos convencidos de que el proyecto de enfermera escolar será muy productivo y queremos que no se quede en un proyecto que finalice el 30 de junio, sino que se prolongue por muchos años.
¿Qué peticiones hace el sindicato a la Administración?
Tenemos varias peticiones. La primera es que debemos mantener y consolidar el número de profesionales que tenemos en Canarias, porque es absolutamente necesario.
La segunda cuestión es que debemos empezar a valorar el incremento de plazas en las universidades canarias para poder paliar nuestro déficit crónico de profesionales.
Asimismo, llega un momento en el que toca revisar las condiciones laborales y económicas de todos los profesionales que están trabajando tanto en atención especializada como en atención primaria. Y luego, hay dos aspectos fundamentales para nosotros: uno es el tratamiento a las enfermeras embarazadas y, por otra parte, todo lo relacionado con la vida familiar y laboral, que está prácticamente “en pañales”.