¿Cómo asegura el SCE que la oferta formativa se adapte a las necesidades reales del mercado laboral canario y a los sectores estratégicos para el desarrollo económico de las islas?
En primer lugar, desde el inicio de la legislatura, desde esta Consejería nos hemos reunido con los sectores estratégicos de Canarias para que nos trasladen las necesidades. Nos hemos reunido con la construcción, la industria, el sector audiovisual, entre otros, para poder detectar esas necesidades y así poder paliar el problema que existe en algunos sectores a la hora de cubrir vacantes.
Es importante indicar, además, que para la elaboración de la oferta formativa del SCE se elabora un diagnóstico de necesidades formativas teniendo en cuenta las características de la población, las necesidades manifestadas por los mismos, el análisis territorial, sectorial, etc…
Además, el Servicio Canario de Empleo utiliza múltiples herramientas y fuentes de información para garantizar que la oferta formativa responda a las demandas reales del mercado laboral y a los sectores estratégicos, además del Catálogo Nacional de Estándares de Competencias Profesionales del MEFP y del Catálogo de Especialidades Formativas del SEPE, el SCE se apoya en los informes y análisis elaborados por el Observatorio Canario de Empleo (OBECAN), que proporciona datos actualizados sobre el mercado laboral y las proyecciones sectoriales. Asimismo, recurre a estadísticas del Instituto Canario de Estadística (ISTAC) y a los datos propios del SCE relacionados con la intermediación laboral, el registro de demandantes de empleo y la evolución de las tasas de ocupación en las diferentes islas.
También se colabora con la Conferencia Sectorial de Empleo y Asuntos Laborales y con la Conferencia Sectorial de Formación Profesional para Personas Trabajadoras y se evalúan tendencias para determinar las necesidades específicas de cualificación.
Estos análisis permiten identificar tendencias emergentes, sectores clave para la economía autonómica, como la transición ecológica, la economía azul y las competencias digitales, y áreas específicas de innovación tecnológica. Con esta información, se definen las especialidades formativas prioritarias que no solo mejoran la empleabilidad de las personas desempleadas, sino que también impulsan el desarrollo de los sectores estratégicos del archipiélago.
¿Qué mecanismos se utilizan para identificar las profesiones y las competencias más demandadas por las empresas y cómo se transmite esta información a los centros educativos y a los desempleados?
La transmisión de esta información a las personas en situación de desempleo y a los centros educativos (además de los medios oficiales como el BOC o el portal de anuncios de nuestra web) se realiza a través de las oficinas de empleo, donde se ofrece orientación personalizada para conectar las competencias de los demandantes con las oportunidades formativas disponibles. Además, el SCE subvenciona y promueve otras vías de información como los programas de orientación laboral, las plataformas digitales de búsqueda de empleo y formación, y los talleres de activación para el empleo organizados por las entidades colaboradoras. Asimismo, se dispone de campañas informativas a través de redes sociales y portales específicos del SCE, que permiten difundir de manera amplia y accesible la oferta formativa y las oportunidades de desarrollo profesional.
Estas iniciativas garantizan que las personas desempleadas puedan acceder fácilmente a la información y los recursos necesarios para su mejora profesional y empleabilidad.
¿Cómo evalúan la efectividad de los programas de formación y cómo se organiza que los participantes adquieran las competencias necesarias para encontrar empleo?
El SCE implementa controles de calidad y auditorías regulares como exige la normativa. Estas evaluaciones incluyen el seguimiento de la participación del alumnado y la recopilación de cuestionarios de evaluación tras la finalización de los cursos.
Los indicadores clave incluyen tasas de finalización, inserción laboral y adecuación de las competencias adquiridas a los requerimientos del mercado.
Se exige a las entidades formativas garantizar una alta calidad técnica y pedagógica en los programas impartidos, que deben alinearse con las directrices establecidas en las normativas nacionales y autonómicas.
¿Qué tipo de colaboración existe entre el SCE y los centros educativos de formación profesional? ¿Cómo se garantiza la coordinación entre la formación teórica y la formación práctica en las empresas?
Hoy en día la relación con el viceconsejero de FP es bastante estrecha, ya que los certificados profesionales que expide el SCE se han incorporado a la FP con la nueva Ley de Formación Profesional.
Además, desde el curso pasado tenemos en común la iniciativa “Capacítate: la discapacidad no te limita” y NEAE+21, dirigidos a mejorar la empleabilidad y la integración laboral de personas con discapacidad en Canarias. Su objetivo principal es derribar barreras para que las personas con discapacidad puedan formarse y acceder a empleos dignos. Se empezó con un itinerario en Gran Canaria y otro en Tenerife y para este curso escolar hay 54 itinerarios en 6 de las 8 islas.
Desde el Servicio Canario de Empleo se está trabajando en implantar la FP Dual a lo largo de este año en nuestros Certificados de Profesionalidad. Los proyectos piloto los haremos con los dos Centros de Referencia Nacional del SCE, cuyas áreas temáticas son la jardinería en Los Realejos y la Imagen Personal en Las Palmas de Gran Canaria.
¿Se fomenta la participación de las empresas en la definición de los programas formativos y en la realización de prácticas profesionales?
Dentro del Servicio Canario de Empleo está el Consejo General de Empleo donde se aprueban los planes formativos, En el mismo participan los agentes sociales y económicos de las islas.
Además, estamos trabajando con las confederaciones para la implantación de la FP Dual. Son ellas las que contactan con las empresas para primero informar sobre la nueva FP Dual, ya que existe desconocimiento y luego elaborar una base de datos de empresas que ya estén preparadas para entrar en esta primera fase de implantación de la FP Dual en Canarias.
Y como se comentó anteriormente, nos hemos reunidos con los sectores estratégicos de Canarias para detectar necesidades.
Si hablamos de desafíos, ¿cuáles son los principales desafíos que enfrenta el SCE en cuanto a la formación de los desempleados?
El principal desafío al que nos enfrentamos es que las personas desempleadas reciban la formación y las competencias que demanda el mercado laboral. Tenemos que ser capaces de elaborar planes y programas formativos que les permitan adquirir las destrezas que se demandan y así lograr una inserción laboral más rápida y eficaz.
¿Cuál es su visión para el futuro de la formación en Canarias? ¿Qué papel jugará el SCE en la formación de los trabajadores del futuro?
Tenemos que responder a las necesidades presentes y futuras de las empresas, alinearnos con las demandas del mercado laboral. Esto pasa por la formación, que se actualizará para el periodo 2025-2027. Estamos ya trabajando para que con el auge de la digitalización y la inteligencia artificial podamos promocionar la formación digital con programas específicos en competencias tecnológicas.
La sostenibilidad será también un factor determinante para el futuro en Canarias. Por ello, hemos puesto en marcha proyectos con las tres Mancomunidades de Gran Canaria para formar a 324 desempleados en energías renovables y en creación de empresas que den soporte al desarrollo de este sector.
¿Qué mensaje le gustaría transmitir a los jóvenes canarios sobre las oportunidades laborales que existen en las islas y la importancia de la formación continua?
A los jóvenes les diría que la formación es el puente hacia los sueños y metas. Que el futuro está en sus manos. En la sociedad actual donde todo cambia y evoluciona rápidamente, la formación es más importante que nunca. No sólo abre puertas a las nuevas oportunidades de empleo, sino que nos permite adaptarnos a las transformaciones tecnológicas y sociales.
Invertir tiempo en formarnos es invertir tiempo para mejorar nuestra calidad de vida.