En el corazón de Santa Cruz de Tenerife, un centro de psicología y educación se ha convertido en un refugio para familias que buscan apoyo y crecimiento personal. Esta iniciativa, liderada por Laura y Ángela Blázquez Tello, ha evolucionado desde sus humildes comienzos hasta convertirse en un referente en su sector. A través de un enfoque centrado en la persona, han sabido adaptarse a las necesidades de su comunidad, ofreciendo un servicio que no solo se enfoca en la calidad profesional, sino también en el amor y el acompañamiento hacia cada uno de sus pacientes.
“Siempre hemos tenido una visión clara: crear algo que no solo aportara valor a las personas, sino que también respondiera a una necesidad real”, comentan. Desde el inicio, su objetivo ha sido ofrecer un servicio que combine “calidad humana, acompañamiento y mucho amor para dar una experiencia personalizada”. Este enfoque ha sido fundamental para diferenciarse en un sector altamente competitivo. “Lo que nos diferencia es nuestra capacidad de adaptarnos a cada paciente y generar un impacto positivo tanto en la comunidad como en la vida familiar y personal de cada una de las personas que pasan por nuestro centro”, añaden con convicción.
La trayectoria de Laura y Ángela ha estado marcada por desafíos y aprendizajes. “Al principio, todo era un reto. Desde la planificación hasta el lanzamiento, fue una etapa muy dura pero gratificante”, recuerdan. A pesar de las dificultades iniciales, su dedicación y esfuerzo han dado frutos. “Un momento clave fue la llegada de los primeros pacientes y ver cómo, en pocas semanas, el ‘boca a boca’ nos hizo ver la satisfacción de cada uno de ellos”. Este feedback positivo no solo les motivó a seguir adelante, sino que también les permitió crear un entorno donde los pacientes se sienten “como en su propio hogar”.
Con la mirada puesta en el futuro, ambas emprendedoras tienen grandes aspiraciones. “Nuestro objetivo a largo plazo es consolidar el centro como un referente en el sector de la psicología y la educación en Santa Cruz de Tenerife”, afirman. Quieren que su proyecto sea reconocido no solo por la calidad de los servicios que ofrecen, sino también por el impacto positivo que generan en las personas y en su entorno. “Queremos seguir creciendo de forma sostenible y ver cómo nuestros pacientes logran un crecimiento personal, académico y familiar”.
Emprender en un panorama empresarial tan competitivo no ha sido una tarea sencilla. “Fácil no ha sido, pero los retos son parte del camino”, reconocen. Para ellas, cada obstáculo es una oportunidad para aprender y mejorar. “Lo que más me ha ayudado ha sido mantener una visión clara y rodearme de personas que comparten mi entusiasmo”, añaden, destacando la importancia del apoyo mutuo en el emprendimiento.
Entusiasmadas por el futuro, Laura y Ángela están trabajando en una nueva iniciativa que promete ser un gran aporte para las familias. “Estamos desarrollando talleres especializados enfocados en la crianza respetuosa, el establecimiento de límites y la comunicación dentro de la familia”, explican. Este nuevo proyecto no solo busca abordar necesidades educativas especiales, sino que también tiene como objetivo fortalecer la comunidad a través de colaboraciones con otras iniciativas locales. “Estamos muy emocionadas con las oportunidades que traerá para todos”, concluyen, reflejando la pasión y el compromiso que han guiado su trayectoria empresarial.
En un mundo donde el bienestar psicológico y la educación son más importantes que nunca, Laura y Ángela Blázquez Tello se han posicionado como referentes en Santa Cruz de Tenerife, creando un espacio donde el acompañamiento y el amor son la base de cada interacción.
