¿Cuál es la misión y visión de The Thin Line en cuanto a convertir a Lanzarote en un destino de lujo?
Siempre hemos intentado, no solo convertir a Lanzarote en un destino de lujo, sino convertir a Lanzarote en un destino de compras. Actualmente, los datos que nos llegan de todas las capitales europeas dejan constancia de que el 60% del turismo se basa en un turista de compras. Hay una gran parte del turismo a nivel mundial que se enfoca en las compras.
Nuestra idea de negocio pasa por traer las primeras marcas de lujo existentes en el mercado a Lanzarote para que el turismo que viene a la Isla venga atraído por el hecho de poder comprar estas marcas, que no pueden ser adquiridas en todos los lugares del mundo, pues hablamos de marcas exclusivas.
Asimismo, en los últimos años se ha invertido una gran cantidad de dinero en hoteles cinco estrellas y restaurantes con estrellas Michelin. De lo que se trata es de darle mejores servicios al turista que nos visita, lo cual debe estar acompañado de la posibilidad de hacer shopping en un ambiente de lujo.
Esta es, en líneas generales, la actividad que nosotros estamos llevando a cabo de la mano de otros empresarios que van hacia la misma dirección: en busca de un turista de lujo.
¿Cuáles son las características únicas de Lanzarote que hacen que sea un destino atractivo para el turismo de lujo?
Hay varios aspectos: el clima, la cercanía a cualquier capital europea, los paisajes naturales, los parque nacionales y la cultura de la Isla. Además de estos atractivos, es importantísimo que cuando este tipo de turista llegue a Lanzarote pueda acceder a servicios de un nivel superior.
¿Cuál es la relación de The Thin Line con otras empresas y actores clave de la industria del lujo en la Isla?
Tenemos muchas colaboraciones, porque el turista que se aloja en un hotel cinco estrellas es el mismo turista que pasa por nuestras boutiques a comprar. En este sentido, es importante que el hotel donde aloja este turista conozca la posibilidad de ofrecerle este tipo de servicios, así como que nuestros clientes tengan conocimiento acerca de dónde pueden ir a comer, dónde pueden encontrar una villa… Es una clientela que consume mucho pero que, a la par, es muy exigente en sus demandas. Por ello, constantemente estamos entablando colaboraciones con hoteles y restaurantes, porque abarcamos al mismo consumidor.
¿Cuáles son los criterios utilizados por The Thin Line para seleccionar y ofrecer productos de lujo en Lanzarote?
El criterio es solo uno: poco pero bueno. Los artículos que comercializamos tienen un coste elevado que va acompañado de un servicio y una atención de primer nivel por parte del personal. Estamos hablando de prendas de lujo que rondan los 5.000-6.000 hasta los 10.000 euros. Asimismo, aportamos servicios de envío a domicilio para que si, por ejemplo, compras un bolso y no tienes espacio suficiente en tu maleta para llevarlo, puedas comprarlo y recibirlo en tu casa.
Hay que tener en cuenta que hoy en día todo el mundo puede comprar en Internet. Por esta razón hacemos especial hincapié en la experiencia y la calidad del servicio, porque es lo que hace que el cliente valore la compra en establecimientos físicos.
“Constantemente estamos entablando colaboraciones
con hoteles y restaurantes, porque abarcamos al mismo consumidor”
¿Cuál es la estrategia de crecimiento y expansión de The Thin Line?
Somos conscientes de que estamos atendiendo a momentos complicados a razón del consumo en general: hay incertidumbre e inflación. Nuestra estrategia pasa por seguir manteniendo nuestros estándares de calidad: estamos constantemente buscando nuevas marcas, siguiendo las tendencias actuales y mejorando nuestros servicios. 2024 va a ser un año de mantenimiento. Trataremos de mejorar lo que ya hemos creado, pero no considero que vaya a ser un año de crecimiento, considero que será un año de consolidar lo ya existente.
