Comienza un 2024 cargado de ilusión y de muchísimo trabajo, un año post electoral donde hay que asentar muchas cuestiones. ¿Cómo lo has comenzado tú, como alcaldesa de Candelaria y presidenta de la FECAM?
Con mucha intensidad. Una intensidad que ha sido la tónica de estos últimos años, desde que abordamos la situación extraordinaria de la pandemia. Desde entonces, se ha producido un esfuerzo intenso desde el ámbito local.
Somos la administración más cercana a los vecinos y, aunque en muchas ocasiones los vecinos no distinguen si el ayuntamiento es competente o no de acuerdo con el problema que quieren solucionar, nosotros, si no es competencia del ayuntamiento, debemos tener la voluntad y el compromiso de acudir a otras administraciones para intermediar y solucionar cualquier cuestión que el vecino nos plantee.
Desde la FECAM estoy muy agradecida a mis compañeros, alcaldes y alcaldesas de toda Canarias. La Asamblea la celebramos el pasado mes de octubre, hemos estado inmersos en el proceso de creación de los órganos ejecutivos y la realidad es que estoy agradecida y comprometida con el equipo de la Federación, y con todo el personal de los ayuntamientos pues, al final, somos interlocutores oficiales del Gobierno de Canarias, y cabe decir que hemos encontrado una interlocución positiva en estos primeros meses de mandato. En esta línea, nos estamos reuniendo con las diferentes consejerías; ya el pasado mes de diciembre nos reunimos con el presidente del Gobierno de Canarias y con los diferentes Cabildos a través de la interlocución con la Fecai.
Centrándonos en la FECAM, hablamos de un Comité Ejecutivo renovado que comienza su nueva andadura. En un contexto económico y municipal, ¿cuáles son los objetivos que se marca la FECAM para este 2024?
La FECAM tiene una gran fortaleza, que es precisamente la unidad de acción. A nadie se le escapa el contexto económico y político por el que hemos atravesado, inmerso en episodios de confrontación que nadie desea y, desde luego, algo que refuerza a la FECAM es precisamente esa unidad de acción que espero que se mantenga y que es mi labor como presidenta, pues debo mantener y consolidar la buena sintonía que se da entre todos los compañeros, donde estamos todos los grupos políticos representados.
El Comité Ejecutivo se ha conformado en base a la Ley D ́Hondt, con lo cual, hay una representación proporcional de lo que toda la población de Canarias ha votado en los municipios del archipiélago. Por ende, insisto, contamos con pluralidad política y todos luchamos por lo mismo: el municipalismo y los retos que tenemos por delante.
Entre estos retos nos encontramos con seguir insistiéndole al Estado en que el municipalismo requiere de una financiación adecuada para cumplir con las competencias propias de los ayuntamientos y con la autonomía local que defendemos. También hay que revisar algunas cuestiones que giran en torno a esta autonomía, porque a lo largo de los años se han ido consolidando competencias en los municipios que se han mal llamado “impropias” y que se han comenzado a adquirir porque la norma lo permitía. La evolución de la norma con la ley de estabilidad presupuestaria y con las reglas fiscales impuestas por la nueva fiscalidad europea cambió el contexto económico hace más de 10 años. Nosotros entendemos que son leyes que se deben modificar, porque el gasto es para cumplir con los servicios públicos. En este sentido, por la situación coyuntural derivada de la pandemia y la situación económica que estamos atravesando, se han suspendido las reglas fiscales.
Para ponerles en situación, nosotros nos encontrábamos en una situación de ahorro, pues no se nos permitía gastar y lo que estaba sucediendo era que teníamos depositado en los bancos el dinero, no lo podíamos gastar y, sin embargo, estábamos pagando impuestos e intereses a los bancos por el mismo. Era inaudita la situación en la que nos encontrábamos.
La pandemia provocó que se suspendieran esas reglas fiscales, porque la Unión Europea activó la cláusula de salvaguarda que permitía a los Estados flexibilizar o suspender; España lo hizo y, por tanto, todos hemos podido utilizar los denominados remanentes municipales.
Ahora nos encontramos con unos límites, pero podemos seguir utilizándolos, por lo que veremos cómo evoluciona esta situación. Este va a ser uno de nuestros caballos de batalla durante el nuevo mandato: conseguir que haya una armonización de la financiación.
Mucho hablamos de la financiación autonómica pero no menos importante es la local…
Desde el Estado siempre se habla de la financiación autonómica, que entendemos que es un pilar importante del Estado del Bienestar por las competencias transferidas, tales como sanidad o educación, pero es verdad que no son menos importantes las locales, pues tenemos responsabilidades importantes en la gestión de servicios básicos como el abastecimiento de agua o el tratamiento adecuado de los residuos.
Y, actualmente, se hace más necesario que nunca pues nos enfrentamos a desafíos como el cambio climático y las diferentes leyes de economía circular, que hacen que todos los modelos de desarrollo sostenible se tengan que implementar, de lo cual todos somos corresponsables. Para ello necesitamos dotarnos de herramientas y en esa línea nos estamos reuniendo con diferentes consejerías del Gobierno y a través de la FEMP con el Estado para intentar avanzar.
Cambiando de tercio, hay otras cuestiones muy concretas como darles estabilidad a los empleados públicos, para lo que contamos con la estabilización de estos que debemos culminar en este 2024. También incidiremos en otros ámbitos como en el de la seguridad, abordando la nueva ley de playas, tras la derogación del decreto de las playas de municipios con menos de 20.000 habitantes. Estamos, a su vez, con la Ley de Coordinación de la Policía Local, en la que también es muy importante avanzar en la negociación con el Gobierno, ya que partíamos de un borrador ya consensuado por todos los grupos políticos, pero que finalmente no entró en el Parlamento durante el mandato pasado y nuestra aspiración es que pueda entrar durante el presente mandato. Y luego, hemos tenido alguna reunión con las áreas de Planificación Territorial del Gobierno, porque hay cuestiones sobre la Ley del Suelo que quieren ser modificadas y por ello estamos recibiendo las propuestas, estudiándolas y consultándolas a los municipios para hacer llegar nuestra posición al Gobierno.
Respecto al sector turístico, hemos tenido una reunión con la consejera de turismo y empleo, pues a nadie se le escapa la problemática y la incidencia que está teniendo el auge del alquiler vacacional o el uso de la vivienda residencial como turística en muchas localidades de Canarias. La FECAM no está en contra de ese modelo, que puede ser un modelo económico interesante, pero hay que regularlo. Nosotros entendemos que debe haber algún tipo de regulación y por ello apostamos en la consulta pública que el Gobierno de Canaria ya avanzó a través de la Dirección General de Ordenación Turística, donde vimos que el Gobierno tiene la intención de regular.
En definitiva, son muchos los retos que tenemos por delante y desde la FECAM no vamos a mirar hacia otro lado, sino que nos vamos a implicar, como hemos hecho siempre. Y me consta el compromiso que tienen nuestros compañeros, alcaldes y alcaldesas, y la preocupación que nos trasladan en cada reunión que celebramos.
“Este va a ser uno de nuestros caballos de batalla durante el nuevo mandato: conseguir que haya una armonización de la financiación”
Hablabas del turismo e, incidiendo en Candelaria, han hecho un ejercicio de reflexión decidiendo no estar en Fitur. No obstante, estarán presentes en otra importantísima cita, donde además repiten y con expectativas muy positivas, como es Madrid Fusión, ¿verdad?
Sí. El año pasado tomamos la decisión de no acudir a Fitur, entendemos que es una gran feria y una oportunidad para el posicionamiento turístico de muchas localidades a través de la comunidad autónoma y los Cabildos Insulares, pero a nivel local quedamos un poco más diluidos en lo que engloba a la feria. Entendimos que quizá no era un recurso totalmente efectivo para conseguir el objetivo de posicionar a Candelaria como destino turístico atractivo a través de sus recursos y elementos.
Nuestro principal elemento de atracción turística es la Virgen de Candelaria, tenemos la suerte de contar en nuestro municipio con la Patrona de Canarias y para nosotros es muy importante la dimensión religiosa, la cual respetamos y yo personalmente comparto. De hecho, Candelaria recibe más de 2 millones de visitantes al año, principalmente locales. No obstante, en estos meses se está produciendo una recuperación del nivel de visitantes extranjeros en el municipio.
En ese ejercicio de reflexión que hemos hecho, hemos incidido en ver cómo podemos fortalecer y qué otros ámbitos podemos impulsar de cara a diversificar la riqueza patrimonial, etnográfica y cultural del municipio. Y desde luego, algo que hemos considerado potenciar es el destino gastronómico Candelaria con la creación de una marca que se denomina “El Club del Producto” y con una nueva imagen turística. Hemos intentado poner en valor todos los recursos, desde los productos locales, la riqueza de nuestras medianías y el apoyo a la producción local, tanto al campo como al sector pesquero. Con la producción local tenemos un proyecto sobre la mesa de renovación del Mercado de la Producción Local, que viene a ser una apuesta decidida de apoyo al producto local.
Además, hemos retomado, tras la pandemia, el sello del Sistema de Calidad Turística en Destino (SICTED), que hace que las empresas adheridas realicen un esfuerzo mayor por imprimir esos estándares de calidad al servicio y los productos que ofrecen, donde hay un acompañamiento continuo y constante por parte del ayuntamiento en la formación. Insistimos mucho en que haya formación y conocimiento del ámbito de cada empresa para avanzar.
Formación, conocimiento, diversificación y ser conscientes y coherentes con el entorno. En este sentido estamos trabajando en aras de diversificar el tejido empresarial del municipio, el cual vemos con muchas oportunidades.
¿A qué retos se enfrenta Candelaria en estos tres años y medio que quedan por delante?
El reto pasa por culminar el proceso de transformación del municipio hacia una ciudad. Ya Candelaria es más ciudad que pueblo, aunque el alma de pueblo no queremos perderla, pues tenemos un arraigo e identidad que no queremos perder, pero es indudable que el desarrollo del municipio ha hecho que en los últimos 20 años se haya triplicado la población.
A principios de 2020 estábamos en torno a 10.000-12.000 habitantes y ahora estamos en 32.000. Estamos hablando de ciudadanos censados, si atendemos a la población flotante podemos llegar a tener cerca de 60.000 habitantes en determinadas épocas del año.
La transformación del municipio con las obras que tenemos por delante en este mandato son claves. Antes hablaba de los sectores productivos, pero toda la renovación de nuestro litoral, de las infraestructuras deportivas, culturales, todo el despliegue de las redes de saneamiento hacia la depuradora comarcal va a ser una apuesta firme por la sostenibilidad, pero también una oportunidad para trabajar en el embellecimiento y en la regeneración de muchos espacios públicos del municipio. Ahí estamos conciliando proyectos para intentar que esa transformación sea una realidad. Este es el gran reto que tenemos por delante.
Mari, has apostado por el municipalismo, tanto en Candelaria como en la FECAM. Imagino que mantienes la esperanza de que durante esta legislatura haya una buena comunicación en torno a los proyectos entre todas las administraciones, sea del color que sea.
Yo creo que sí. Hasta ahora se ha mantenido la unidad de acción y esa capacidad de diálogo y consenso. Es bueno que haya debate y diálogo, porque confrontar ideas es siempre muy positivo, pero siempre con el ánimo de construir, evolucionar y avanzar. Esta es la clave del progreso.