¿Cómo se consigue que un Grupo como Félix Santiago siga cosechando año tras año vivencias y trabajos después de tanto tiempo? ¿Cómo se consigue mantener en el mercado?
El Grupo Félix Santiago tiene muchísimos años de experiencia, así como un prestigio y un nombre que hacen que, concretamente en el mercado inmobiliario, tengamos un servicio de calidad hacia el cliente que avala la trayectoria y hace que nos aprecien, lo cual nos da un plus de prevalencia sobre la competencia.
Hablando de la competencia, me imagino que en un entorno tan globalizado y con una competencia tan voraz, se torna complicado mantener el liderazgo en el mercado…
Hoy en día, en Gran Canaria en concreto, la mayor parte de las promociones de obra nueva que están saliendo provienen de empresas peninsulares que actúan a nivel nacional. Promotoras canarias quedamos muy pocas, pero el público aprecia el prestigio y la calidad de la promotora canaria, más aún en un producto inmobiliario en el que la posventa goza de gran relevancia.
Después de la crisis del 2008 muchas empresas quedaron obsoletas y otras tantas no lograron sobrevivir a la misma, ¿cómo se vivió desde vuestro Grupo? ¿Fue complicado seguir hacia adelante?
La crisis del 2008 nos afectó en la misma medida que al resto de promotores, pero gracias al músculo del grupo y a la diversificación en otras actividades logramos superarla con muchísimo esfuerzo y dificultades. En este sentido, trabajando de la mano de los bancos logramos deshacernos del stock de viviendas que teníamos. Estuvimos varios años sin retomar la actividad de promoción de viviendas, pero sobre el 2017 volvimos a promover.
¿Fue, a su vez, la crisis del covid una merma para ustedes?
A nosotros el covid a nivel de ventas no nos afectó, salvo en determinados meses en los que no se podía vender porque estábamos confinados. Sí nos afectó, porque además de ser promotores somos constructores de nuestras propias promociones y en el ámbito de los suministros afectó bastante.
Actualmente, estamos inmersos en discusiones a nivel nacional que entablan el tema de la vivienda. La vivienda vacacional empieza a ser un problema, escasean las viviendas…, ¿qué opinión les merece a ustedes como Grupo?
El tema de las viviendas vacacionales a nosotros particularmente no nos afecta, porque nosotros promovemos en zonas residenciales, no turísticas. Con lo cual, no nos vemos afectados por las viviendas vacacionales que en zonas turísticas sí que afectan porque tensionan los precios al alza, tanto de la compra de viviendas como del alquiler.
¿Cuáles dirías que son las principales características de vuestras promociones?
Tenemos muy dominado un producto de primera residencia. En los años pre-crisis financiera nos centramos en viviendas de dos y tres dormitorios, pero en la actualidad nos hemos centrado en viviendas de un dormitorio que están teniendo una gran demanda, fundamentalmente para inversores que las compran para alquilar. Esta es la principal diferencia respecto a los años anteriores a la crisis. Por lo demás, seguimos con el mismo producto: pisos de dos y tres dormitorios, viviendas prácticas, con distribuciones adecuadas y características propias de una primera residencia. Por su parte, algo que hemos percibido es la necesidad de viviendas con espacios al aire libre, ya sean balcones o terrazas.
Me llama la atención cómo han cambiado los hábitos de la sociedad y la manera en la que los mismos se han trasladado a la vivienda.
Siendo francos, esta situación también viene derivada de los altos costes de la vivienda. Económicamente, adquirir una vivienda es más costoso que en épocas anteriores, dada la financiación, que se ha endurecido y puesto que no se financia el 100% de la vivienda. Al dificultar el acceso a la vivienda en ese sentido, el cliente opta por buscar viviendas más pequeñas que, a la par, son más económicas.
¿Acarrean problemas a raíz de la burocracia institucional, que es de lo que se vienen quejando tanto las patronales como las empresas del sector?
A nivel municipal, en el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria sí que hemos notado una mejoría con respecto al inicio. Los plazos se han agilizado bastante, pero en mi opinión siguen siendo todavía muy largos, estamos hablando de que allá por el 2017 se tardaba en torno a un año y ahora se ha reducido, pero estamos en torno a los cinco o seis meses.
Hablando de la calidad, para el Grupo la calidad de la vivienda y de los acabados es vital.
Sí. Es muy importante y también hemos mejorado en ello respecto a la crisis financiera anterior. Buscamos, además de la calidad básica, aportar un toque de diseño, tanto en el envolvente del edificio como en el diseño interior de la vivienda.
