En un momento de transformación tecnológica global, Canarias se abre paso en un sector clave: la microelectrónica y los semiconductores. Con una posición estratégica y el apoyo de políticas públicas innovadoras, la región se prepara para asumir un papel destacado en esta industria de vanguardia. Proexca, la empresa pública encargada de la promoción económica exterior de las islas, está liderando iniciativas y alianzas estratégicas para diversificar su economía y posicionar el archipiélago en el mapa de la tecnología avanzada.
Abordamos, con Gustavo González de Vega, vicepresidente de Proexca, los avances y los logros de esta entidad en un sector que promete aportar competitividad, empleo cualificado y nuevas oportunidades para la economía insular, desgranando las claves de esta apuesta estratégica.
¿Cuál ha sido el punto de partida de Proexca en su apuesta por el sector de la microelectrónica y los semiconductores en Canarias?
En los últimos años, Proexca ha identifi-ado el sector de los semiconductores como una vía prometedora para la diversificación económica y tecnológica de Canarias. Este interés determinó la creación de una estrategia específica de microelectrónica y semiconductores para 2022-2027, que promueve la región como un enclave atractivo para inversiones tecnológicas de alto valor añadido. La estrategia incluye la iniciativa Canary-Chip, una marca que refleja nuestra visión de posicionar a Canarias en el mapa global de la industria y que facilita una identidad reconocible en eventos internacionales, como SEMICON West en San Francisco. La iniciativa está orientada a hacer de las islas un centro de innovación en microelectrónica, con un fuerte componente de investigación y desarrollo.
¿Cuál fue el enfoque principal de la delegación canaria durante SEMICON West?
Nuestra participación en SEMICON West fue una oportunidad única para establecer conexiones estratégicas con actores globales del sector. Proexca, junto a instituciones clave como el Clúster Chip Canarias y la Universidad de Las Palmas de Gran Ca- naria, se centró en fomentar colaboraciones para el intercambio de conocimientos y para fortalecer el ecosistema local de semiconductores. Buscamos atraer inversiones en I+D y ampliar el talento especializado en Canarias, lo cual es fundamental para consolidarnos en esta industria tan competitiva. La posición de Canarias es aportar nuestra parte en la cadena de valor de esta industria. La creación de relaciones a nivel internacional, junto a la ubicación estratégica del archipiélago, refuerza nuestra posición como un socio confiable para empresas que buscan expandirse en Europa y África.
¿Qué razones motivan a Proexca a impulsar este sector en una región como Canarias? ¿Cómo influye esto en la capacidad de atracción de empresas de semiconductores y microelectrónica?
Precisamente, esa ubicación privilegiada entre Europa, África y América de la que hablaba, permite a las empresas estar en un centro geográficamente estratégico para sus operaciones internacionales y acceder a diferentes mercados. Apostamos por la microelectrónica porque tiene un gran potencial para diversificar la economía hacia una industria de alta tecnología, algo que consideramos fundamental para el desarrollo económico sostenible de las islas. Además, la Zona Especial Canaria (ZEC) ofrece incentivos fiscales que hacen de las islas un entorno atractivo para las empresas, ventaja que reforzamos promoviendo la conectividad y las alianzas estratégicas.
¿Qué papel juegan estos incentivos y el marco legislativo regional en la atracción de este tipo de inversiones tecnológicas?
Los incentivos fiscales de la ZEC son vitales para impulsar estas inversiones. Ofrecen a las empresas tecnológicas una fiscalidad reducida y condiciones flexibles que no encuentran en ningún otro lugar de Europa. Además, el marco legislativo regional es flexible y está diseñado para facilitar la instalación y operación de empresas en Canarias, lo cual añade valor al atractivo de las islas como un centro de innovación tecnológica.
¿Cómo cree que la inversión en este sector impactará a medio y largo plazo en la economía canaria?
Creemos que esta industria puede tener un impacto significativo y positivo en el empleo y la economía local. Al establecer un ecosistema de alta tecnología, podemos fomentar la creación de empleo cualificado, retener el talento joven y reducir la fuga de cerebros, y atraer profesionales del exterior. A largo plazo, buscamos que la microelectrónica y los semiconductores sean un motor que dinamice la economía canaria, con efectos en otros sectores como la educación y la investigación aplicada en nuestras universidades, creando sinergias con instituciones tecnológicas internacionales y empresas de referencia. Para la sociedad canaria es una inmensa oportunidad de aprovechar oportunidades de empleo en un sector que está en plena expansión.
¿Qué tipo de colaboraciones o alianzas estratégicas está estableciendo Proexca para facilitar la entrada de esta industria?
Hemos establecido alianzas con centros de investigación y empresas tecnológicas globales. Un ejemplo reciente fue nuestra participación en SEMICON West, donde colaboramos con instituciones como el Clúster Chip Canarias y universidades para conectar a empresas locales con actores internacionales. Estas alianzas permiten que Canarias sea reconocida y respetada como un entorno de I+D en microelectrónica y semiconductores.
¿Cuál es el perfil de empresas de microelectrónica y semiconductores que ya han mostrado interés o han comenzado a establecerse en Canarias?
Las empresas interesadas son desde las que se dedican a la fabricación de chips hasta compañías de software y diseño de sistemas electrónicos. Estamos trabajando para atraer una mayor variedad de empresas tecnológicas que puedan complementar y robustecer el ecosistema local.
¿Cuáles son los principales desafíos que enfrenta Canarias para consolidarse en el sector de la microelectrónica?
Uno de los mayores desafíos es la fuerte competencia global en este sector, ya que muchos países están invirtiendo considerablemente en microelectrónica, y la necesidad de atraer inversiones en un mercado altamente demandante de capital y talento
especializado. Para Canarias, consolidarse en esta industria significa fortalecer su infraestructura de I+D y asegurar que los incentivos fiscales sigan siendo atractivos. Otro reto es el desarrollo del talento local, que estamos abordando con la creación de programas de formación específicos.
«Buscamos que la microelectrónica y los semiconductores sean un motor que dinamice la economía canaria»
¿Qué expectativas tiene Proexca en cuanto al crecimiento de este sector en los próximos cinco años?
Esperamos que el sector crezca de manera sostenida, impulsando la creación de empleo especializado y fomentando la innovación. En cinco años, aspiramos a que Canarias sea reconocida como un hub de microelectrónica y semiconductores en el Atlántico, con empresas y centros de investigación de primer nivel. Este desarrollo fortalecerá la economía insular y abrirá nuevas oportunidades de colaboración internacional. Proexca está comprometida a apoyar a las empresas en cada etapa, y junto con nuestros socios, facilitar un ecosistema de colaboración y crecimiento. Canarias es el lugar ideal para expandirse en un sector innovador y con un alto potencial de crecimiento.