¿Qué balance hace de estos primeros meses del año? ¿Hablamos de una campaña de rebajas positiva?
Sí. Yo creo que la campaña de rebajas ha sido tremendamente positiva y no lo digo yo, sino que lo dicen las cifras que publica el Instituto Nacional de Estadística, partiendo de los índices de aumento de las ventas del comercio minorista en Canarias, donde estamos situados en el grupo de cabeza a nivel nacional, con unos incrementos que siempre superan el 4-5%. Por lo tanto, yo creo que la percepción de la campaña y del índice de ventas es muy positiva en general.
¿Cuál es la visión estratégica del Gobierno de Canarias para este año 2024? ¿Cuáles van a ser los planes que acentarán su estrategia a nivel comercial?
La estrategia va a ir en una doble vertiente. Por un lado, queremos reforzar la estrategia ya iniciada de transformación del modelo de negocio del sector comercial de Canarias. Entendemos que estamos en una ocasión única para adaptar los comercios de Canarias a un nuevo tipo de consumidor que ha llegado para quedarse, un consumidor que cada día es más exigente, que cada día requiere de más experiencias, tanto a nivel físico como a nivel digital. Este es el principal reto que nos hemos marcado para para este año: desarrollar los programas que sean necesarios para adaptar el modelo comercial canario a este nuevo consumidor digital.
Un nuevo consumidor que también está muy ligado al turismo. No cabe duda de que el comercio es un eslabón más de la cadena turística y me imagino que en este sentido tienen una estrategia para promover el turismo de compras en Canarias, ¿verdad?
Efectivamente. Para ello contamos con un aliado fundamental, que son las zonas comerciales abiertas.
Si hacemos hincapié y miramos hacia nuestras zonas comerciales abiertas, podemos atisbar cómo en Canarias gozamos de una ventaja competitiva en ese sentido. Nuestras zonas comerciales abiertas se definen como espacios físicos al aire libre que concentran todo el patrimonio histórico, arquitectónico y cultural de nuestras ciudades, así como el ocio, la restauración y las compras. Un mix potente que es hora de alzar y potenciar.
En esta línea, la delimitación de la zona comercial debe convertir a Canarias en un destino turístico que ofrezca experiencias de calidad provenientes de la actividad comercial que en ellas se concentra. Ha llegado el momento de que el comercio, como eslabón de la cadena turística, también genere valor de experiencia respecto a ese turista que viene a visitar nuestras islas.
En este sentido David, ¿cuál es la visión a futuro para estas zonas comerciales abiertas en Canarias, que cada vez tienen mayor peso? ¿Cuáles son los planes para su desarrollo?
Los planes pasan por profesionalizar la gestión de las zonas comerciales abiertas.
Nosotros creemos que ha llegado el momento de que las zonas comerciales abiertas tengan una regulación propia y puedan ser objeto de desarrollo normativo para profesionalizar su gestión, para concretar exactamente el ámbito de cada zona comercial y para convertirlas en espacios dedicados al turismo de experiencias.
Hasta ahora esta estrategia que pasa por convertir a las zonas comerciales en un producto turístico no se ha desarrollado y considero necesario que desde el Gobierno de Canarias se promuevan acciones para conseguir que el turismo de compras y el desarrollo de nuestras zonas comerciales sean también objeto de promoción turística.
Y enlazando con lo que comentaba al principio, incidiendo en transformar el modelo de los comercios de estas zonas comerciales para que se adapten a nuestros visitantes, a nuestros consumidores internos y a sus respectivas necesidades.
