Entrevista realizada por:
Natalia Rodríguez Novo. Presidenta del Colegio de Enfermería.
Óscar Rey Luque. Vicepresidente del Colegio de Enfermería.
Ana María González. Secretaria del Colegio de Enfermería.
Comienza una nueva etapa del Colegio de Enfermería con una Junta Directiva renovada y muy femenina, donde Natalia se inicia como presidenta. ¿Cómo se presenta esta nueva etapa?
Natalia: Entre las personas que forman parte de esta Junta, algunas vienen heredadas de la anterior, mientras que otras son nuevas. Como bien comentas, la mayoría son mujeres.
Vamos a seguir trabajando en la línea que se ha venido trabajando en años atrás. Consideramos que han tenido lugar muchos logros y un crecimiento a favor de la profesión. Por tanto, vamos a seguir en esta misma línea.
En cuanto a las líneas estratégicas, seguiremos focalizándonos en reivindicaciones históricas. Por ejemplo, el Grupo A, al que ahora la Ministra se ha comprometido en aras de reconocer nuestro papel en el sistema sanitario.
También seguimos reivindicando las especialidades. Hoy por hoy hay una serie de especialidades a las que los profesionales optan y hacen su correspondiente oposición, pero cuando finalizan esa especialidad no tienen un contrato como especialista, por ende, no cobran como especialista.
Por otro lado, nos encontramos con la prescripción enfermera. El año pasado se puso en marcha aquí -en Canarias-, una primera fase donde los enfermeros podían prescribir productos sanitarios, pero el proceso se ha quedado bloqueado y no evoluciona.
A la par, reivindicamos un mayor número de plazas de enfermería. Está claro que existe una necesidad en número de enfermeros. Y también más plazas para el profesorado de enfermería, porque tampoco hay suficientes para formar a todos los enfermeros que demanda el sistema sanitario.
Consideramos relevante, a su vez, la creación de una Academia de Enfermería a nivel regional de cara a visibilizar la profesión y que sirva de nexo para que los académicos del sector puedan opinar respecto a la profesión.
Más allá de lo comentado, cabe citar la adherencia al sistema de salud. Es decir, tenemos una fuga de profesionales, porque no se les aporta estabilidad. El 80% de los profesionales de enfermería son mujeres en edad fértil y, siendo este el perfil, necesitan poder conciliar su vida laboral y familiar, lo que actualmente es casi imposible.
Hablamos de una profesión cada vez más especializada y en lugar de ir ganando mejores condiciones parece que a mejores profesionales, peores condiciones laborales, ¿no?
Ana: Sí. Como decíamos, hay reivindicaciones históricas en las que se podía haber avanzado, pero sentimos, como profesión, que nos hemos quedado bloqueados en esa evolución. Sobre todas las cosas, nuestra prioridad es garantizar la calidad asistencial y la seguridad del paciente, y con todo lo que hemos comentado, no la estamos garantizando.
Parece que la gestión de centros sanitarios y unidades únicamente viene a cargo de otras profesiones del ámbito sanitario. No se ha roto este techo de cristal, que sigue impidiendo que enfermeros y enfermeras lleguen a ocupar cargos de liderazgo en la gestión sanitaria.
Natalia: El sistema sanitario español está en franca crisis de gestión. Lleva 100 años, como mínimo, siendo gestionado por los mismos recursos humanos y con los mismos problemas de gestión. Siempre escuchamos los mismos problemas: déficit de profesionales, listas de espera… Y siempre hay una queja continúa.
Han gestionado el sistema los mismos que no son capaces de sacarlo adelante y buscar otras formas de cuidar a las personas, porque existe un problema muy concreto en el sistema sanitario español y es que el paciente no es el centro del problema del sistema de salud; el sistema de salud se construye en base a unos profesionales, que tienen el control y el poder del sistema, y que siguen siendo el centro del mismo.
Mientras no consigamos que la preocupación por el cuidado a las personas sea el centro del sistema esto no va a cambiar.
Necesitamos crear una estructura de cuidados a las personas: que puedan ser cuidadas en sus casas, que se les pueda acompañar…, y eso no lo hace el sistema. La provincia de Santa Cruz de Tenerife sigue con la misma estructura sanitaria desde hace 50 años, pero ahora con el doble de pobla- ción. Mientras tanto, en la provincia oriental están construyendo centros geriátricos, mejorando las urgencias del Hospital Insular…, en esta provincia no.
Y cuando le preguntas a un gerente de hospital sobre cómo plantea mejorar las urgencias te dice que el problema recae en el que el sistema está colapsado.
Las enfermeras y enfermeros imagino que abogan por una atención domiciliaria, que a día de hoy solo unos pocos tienen la suerte de recibir…
Óscar: Si el sistema público es un sistema financiado por fondos provenientes del Estado es el sistema público el que debe poner los medios para que se produzcan cambios, sino es el sector privado quien va a ocupar su lugar.
¿Por qué el sector privado tiene el 90% de la atención geriátrica? Porque el sector público no ha querido invertir.
Por ello, el modelo debe ser un modelo de cuidados, donde los enfermeros estén en primera línea de atención a las personas.
El Colegio de Enfermería siempre ha predicado la prevención. Enseñar en prevención, ¿verdad?
Óscar: Sí. Efectivamente. En esta línea, me gustaría hablar de la enfermería escolar, una iniciativa que comenzó como proyecto piloto y cuyos resultados han sido excelentes.
Toda la comunidad educativa está encantada con tener una enfermera en el entorno escolar. Debe dejar de ser un proyecto piloto para pasar a ser una realidad.
Asimismo, están surgiendo nuevos modelo de atención de la enfermería…
Ana: Sí. Han surgido nuevos modelos de atención liderados por las enfermeras, como la consulta de la gestión de la demanda compartida, el uso de pruebas diagnósticas como la ecografía o la aplicación de las guías de prescripción enfermera en el ámbito de atención primaria. No obstante, bien es cierto que hay dificultades en el avance, lo cual no quiere decir que no estén instauradas, pero ha sido un arduo trabajo llegar a aplicarlas dentro de los procesos habituales.
“El modelo debe ser un modelo de cuidados, donde los enfermeros estén en primera línea de atención a las personas”
¿Cómo siendo una profesión mayoritariamente femeninas no hay medidas orientadas a una mejor conciliación?
Natalia: El 80-90% del colectivo son mujeres, el perfil ronda los 40 años, por lo que se ubican en una edad fértil. Las empresas tienen adaptación de puestos de trabajo en función de las edades de los niños, pero es cierto que la conciliación es muy relativa.
Ana: En los últimos años se ha visto una pequeña evolución, pero años atrás tener hijos era a costa de un sacrificio personal, familiar y económico, pues muchas personas dejaban de trabajar para evolucionar en otros aspectos.
Natalia: Al margen de lo comentado, después de la pandemia los estudios nacionales dejan constancia que hay muchos compañeros de profesión que han decidido abandonar.
Cambiando de tercio, ¿cómo se vislumbra el futuro de la facultad de enfermería?
Natalia: La realidad viene siendo que las universidad privadas se han comido a la universidad pública; mientras la ULL cuenta con una oferta de 100 plazas, la universidad privada supera estas cifras. La educación pública no está respondiendo a la demanda de la sociedad.
Agradecemos a la universidad privada su oferta, pues gracias a ella podemos contar con un mayor número de enfermeros. No obstante, la pública debe comprometerse a aumentar el número de plazas existentes en la actualidad.
¿Qué proyectos, de aquellos en los que están inmersos, son los más relevantes?
Natalia: El proyecto del cual estamos más orgullosos y que queremos que pronto vea la luz es el de la Casa-museo, que contará con un museo dedicado a la enfermería, albergará un espacio para las sociedades científicas y esperamos que sea la sede de la Academia de Enfermería. A su vez, también contará con una oficina y un espacio de biblioteca.
Queremos que se alce como un espacio de diálogo y de reunión del colectivo.
Ana: Es un espacio que nos proyectará a la sociedad en aras de visibilizar la profesión y la labor que realizamos las enfermeras. Esperamos que este año vea la luz.
Óscar: Entre los proyectos, dentro del propio Colegio seguimos brindando importancia a la formación. En abril realizaremos unas jornadas de enfermería escolar, también en mayo unas jornadas de innovación. Luego, en noviembre estamos planteando la realización de las Jornadas de Emergencias.
Ahora mismo un enfermero que se quiera inscribir a un programa formativo puede acceder a 20 cursos activos a nivel on-line. Además, estamos en el camino de implantar un nuevo programa para la gestión del Colegio que permitirá facilitar los trámites que los colegiados precisen: inscripción de formación, expedición de títulos… De esta manera, el colegiado podrá acceder a la documentación de forma mucho más directa.